Visitando a Noruega (ADVERTENCIA: +18)

Eso último no le gustaba para nada ¿tenía acaso cara de ninfómano o algo? Desde luego de no quería comenzar de un modo agitado como decía el depué de todo entendía a lo que posiblemente se refería, intentó inutilmente liberarse de nuevo pero la pierna de Dinamarca le impedía moverse.

- Muevete, Anko- Hace bastante no le llamaba de ese modo, quizás ahora sentía que podía llamarle lo más semejante a hermano, pero ese no era el caso, quería que se moviese para pode levantarse.

-¿Anko? *abre los ojos, sonriendo. Se coloca sobre èl, acorralándolo en la cama* Me gusta que me llames asì... Me dan ganas de volver a repetir la noche pasada... *lo besa, mientras lo descubre de las cobijas* Creo que no te dejaré levantar en todo el día... *le besa el cuello* Sígueme llamando así y te prometo que no te dejare levantarte de la cama hasta que me lo ruegues...

Tal como la cosa iba no terminaría bien, al parece Dinamarca si era un adicto, quizás no fue una buena idea llamarle Anko, la confianza con e danésl daba asco, apenas le daba un poco ya parecía tomarla como si fueran las personas más cercanas del mundo. Puso su mano en la cara de Dinamarca para que no siguiera besandolo y con mucha fuerza la alejó de su cuello, ahora el problema radicaba en que no lo dejaba uír. Miró en varias direcciones a ver si tenía algo a su alcanze y nada, por lo tanto debía idear rapidamente un plan B, quizás su troll rondaba por ahí, pero no estaba seguro de eso.

-¿Por què te haces el dificil conmigo? *sigue tratando de tirar hacia èl, para seguir besandolo* Vamos... sabes... que terminaràs cayendo ante mi... como anoche y la otra noche... Uhmmm.... vamos... *se separa y lo mira, sentandose sobre la cadera de Noruega* Se bueno... portate bien y serà un buen chico... *le sonrìe, relamiendose* Jeje... Dame unas noches màs y no querràs dejarme ir... cariño... *le toma por las muñecas y vuelve a besarlo.*

Lo de cariño fué demasiado para él, en primer lugar ellos no tenían absolutamente nada, solamente los frutos de la indecente mente de Dinamarca, que por cierto, Noruega desaprovaba totalmente. En segunda instancia eso era un abuso, si algo había ocurrido era por mero accidente, nunca por voluntad propia, y tercero Noruega había perdido la paciencia totalmente. Pataleó como pudo y busco la manera más factible de liberarse de esa situación, lo de las otras noches no se repetiría.

- E-eres molesto - Frunció un poco el ceñó, ya tenía una idea, quizás le dolería más a el que a Dinamarca pero estaba casi seguro que daría resultado. Le dió un cabezaso, uno muy fuerte.

Dinamarca iba a decir algo, cuando Noruega se lanzò hacia èl; pensò que lo que serguìa era un GRAN abrazo de euforia por sus palabras, pero en lugar de eso recibiò un cabesazo:

-Ouch... Nor... no seas tan torpe... Ay... *se sienta erguida, aun con todo su peso sobre Noruega y se soba donde lo golpeò* ¿POr què eres asi? *lo mira* Date cuenta de que no hay espacio, si vas a abrazarme... *entonces sonrie, si le habia molestado la torpeza del otro pero tambièn le pareciò tierno* Je... lo siento... no quise tratarte asì, se que debes estan ansioso... Lo lamento... *lo abraza, acurrucandolo bajo èl.*

Le superaba la poca capacidad de Dinamarca de notar cuando no lo querían, al parecer era una patología pues no hayaba algo explicable que diese razón a este comportamiento el cual había caracterizado al danés durante toda su vida y que últimamente le estaba pareciendo más molesto de lo usual a Noruega. Empujó el cuerpo de Dinamarca para deshacer el abrazo, no quería ser demasiado brusco ya que habían objetos cerca y si se golpeaba con algo y lo mataba(? sus jefes tendrían demasiados problemas (lo que no quitaba el hecho de que no quisiese golpearlo con brutalidad, de hecho, ganas no le hacían falta).

- Suéltame- Y como siempre haciendo uso de su tono firme y pétreo esperó una respuesta que le favoreciera.

Rie divertido:

-No tienes que sentirte avergonzado de querer abrazarme, Nor... A veces yo tambien pierdo la compostura frente a algunas personas y me dan ganas de abrazarlas... O a veces digo una que otra tonteria que se me ocurre en el momento *rìe* Pero fue divertido si lo piensas y tierno... *lo besa* Me gusta que seas asi conmigo... aunque me dolio un poco el golpe... trata de controlar tus impulsos la proxima vez... *suspira* Jeje En esas cosas se nota que eres joven aun... No eres como Suecia o como yo... *le acaricia el rostro*

Una mueca de profundo asco se dibuja en su rostro trás ser besado, para poco después con su mano limpiarse los labios.

- No siento verguenza, solo me molestas- Claro y directo como siempre, aunque probablemente Dinamarca lo interpretaria a su antojo como siempre, sin embargo, nunca perdería la costumbre de decir las cosas a la cara, aún si éste era el caso.

Sintió un escalosfrios cuando le acariciaron el rostro, esas caricias eran extrañas y como siempre poco habituales eran también incomodas por lo que retiró la mano del danés de su rostro. Entre menos lo tocará mejor estaba.

Rie, divertido:

-Vamos... Nor... ya a estas alturas no me puedes pedir que te crea estas cosas... anda... Admite que me amas... Admitelo... Dilo... dilooo... *le sonrie* Yo se que quieres mucho a este danes... *sonrie mas aun cuando le retira la mano* Jeje... Vamos... Dimelo... *le lame la cara XD* Hazlo... yo se que quieres decirlo... se que lo quieres... Se que me deseas... Lo se... lo se...

- No -reprueba mentalemente el comportamiento del otro rubio. No le entraba en la mente de que no sentía nada por el más que meras confusiones, malentendidos e instintos.

Se limpió el rostro después de que Dinamarca le lamiera el rostro, en ese momento la desagradable sensación que había sentido era indescriptible con palabras, como una mecla entre mil cosas molestas, entre ellas nauseas y demases.

-No repetiré. Déjame- Y aunque le costase algunas palabras le ordenaría nuevamente lo dejara.

-No... no te dejaré ir... *le sonríe* Ahora eres mio... mio y solo mio... no puedo dejarte ir as
así nomas... ¿Lo sabes, no? Tienes que pagar algo a cambio de tu libertad... Uhm... no lo se... Algo que podría interesarme... *da una gran sonrisa* Sino, hoy te obligaré a quedarte todo el día aquí en la cama conmigo... *se acerca para besarlo* Toodo el día...

Pensaba para su adentros lo interante que sería que para pagar su libertad recibiera un golpe, en verdad eso sería genial, pero posiblemente no lo aceptaría y tendría que quedarse con él. Se movió un poco con afan de liberarse y aunque pudo un poco no lo logró con totalidad.

-¿Que quieres? - Esperaba que pidiese algo simple para que lo dejase en paz, mientra tanto aun seguía con banales intentos de liberación... definitivamente, una larga mana se avecinaba, una muy larga y molesta.

-Lo que tu quieras darme a cambio de tu libertad... *le habló muy cerca de los labios* Acepto cualquier pago... lo que consideres que vale tu libertad... * dio un suave beso en los labios del noruego y luego una sonrisa pícara* Pero si es pequeña la paga, entonces la tomaré como una cuota... *le ofreció una gran sonrisa* Tal vez podrías dejar de hacerte el difícil y expresar lo que en verdad sientes por mi.

Su libertad de hecho era algo cuyo precio no podía cuantificarse, pero Dinamarca tambien menciono que le demostrará lo que sentía, sin embargo, no se veía en condiciones de darle una patada inolvidable.

- Eres idiota. Suéltame, Anko - Utilizó sus brazos para moverlo, era poco lo que podía y estaba notablemente cansado por las faenas que le gustaría borrar de su mente para siempre. Bufó y reparó en otra dirección, no quería verle la cara, menos cuando insistía en besarlo.

Ríe divertido, como si todo fuese una juego:

-Jeje... No... no... ¿Qué intentas? Aun no me has pagado... ¿Crees que te puedes ir así nomas? ¡Claro que no! No me obligues a hacerte pagar a la fuerza *Se separó un poco, lo suficiente como para verlo intentar escapar, pero no demasiado como para darle una oportunidad de hacerlo. Le ofreció otra sonrisa y entonces lo ayudó a girarse, haciendo que termine boca abajo y por ende, más indefenso aun.* Ey... ¿Esta es tu forma de pagarme? Interesante...

Eso le molestó, ahora tenía aún menos posibilidades de huir. Pensó en las posibles maneras en que le haría pagar, algún día el danés desaparecería y si eso ocurría sería obviamente la persona más feliz de la tierra, bueno, feliz a su modo.
Cuando quedó la pocisión cerro los ojos molesto, ahora si que no tenía muchas opciones.

-Suéltame- Sentenció nuevamente- Ahora- Sonaba aspero, mucho más de lo normal.

Comienza a recorrerle la espalda con besos, suaves, buscando hacerle cosquillas... Así, llega hasta el cuello, donde lo besa, dejándole una gran marca:

-Si supiera... escribiría mi nombre obre tu piel... Así todo sabrían que eres mio... sólo mio... En especial cierto sueco... *ríe, no puede evitar reír ante ese pensamiento... es agradable... un deseo tal vez... ¿Quién sabe?* ¿ Has pensado en hacerte un tatuaje? Mi nombre te quedaría muy bien sobre ti... Con letras grandes, en rojo y negro...

-No.-

Eso nunca ocurriría, los tatuajes no le llamaban la atensión y jamás se tatuaría el nombre de Dinamarca, se arrancaría la médula antes de que eso ocurriese. Un ligero escalosfrios le recorrió el cuerpo y la incomoda sensación de la marca le maltrataba el cuello.

- No soy tuyo, enfermo- Era imposible que a alguien le gustase tanto someterlo, que esperara cuando estubiera libre y se las vería...

Suspira:

-No hay caso... Si sigues siendo así de frío nadie va a quererte, Nor... *finalmente lo suelta y se baja se encima del más chico* Podrías tratar ser un poco más amable... ¿Sabes? Por tu carácter perdiste contra mi... *le dice, sentándose a su lado y mirándolo desde arriba* En fin... supongo que ya es tarde y se vas a tratarme así, no tengo ganas de dedicarte tiempo... *baja de la cama y toma las prendas que le faltan, vistiéndose*

Se relajó cuando todo se volvía un poco más normal, las palabras de Dinamarca en esta ocasión sonaron algo tristes o cansadas, quizás se había cansado del constante rechazo que solía ofrecerle al pobre danés. Se sentó un momento, no dejaría que sus palabras le hablandaran o algo semejante, aunque bien sabía que en el fono "algo" de razón tenía. Facepalm(? interno. No podía pensar esas cosas, no él, lo odiaba pero de que tenía algo de verdad no podía negarlo, menos siendo que siempre había sido directo con sus comentarios. Se giró sin regañarle ni nada, simplemente dejandole vestirse, se sobreentendía que le daba la razón.

Ya con su ropa puesta y arreglado, salió del cuarto, hacia la cocina. Toda la noche le dio hambre, así que era hora de buscar algo que comer...

En la cocina tomó varias cosas para hacer un buen desayuno - almuerzo y se dedicó a devorar... pues si, tenía mucha hambre y ... bueno, esa comida no era de él.

Una vez que se sintió satisfecho, rejunto todo y lo hecho por ahí, donde van las cosas rejuntadas. No iba a lavar, así que también hecho al bote los platos y demás. Por eso las épocas pasadas eran las mejores... sin platos ni delicadezas.

Se levantó y arreglo con relativa calma, todo sea para no escuchar ni ver a Dinamarca que posiblemente estaría comiendo de la comida que no hacía falta decir que no le pertenecían. Cuando escuchó el ruido de los platos e puso alerta ¿Que estaría haciendo? Se vistió rápido y se dirigió a la cocina donde se encontro al antes mencionado tirando todo con los platos incluidos. Apretó los puños y se acercó hacia él para detenerlo, esos platos si bien eran simples y económicos eran parte de su pertenencia y... en resumen no debería estar tirandolos.

- Idiota -Le quitó loss plato violentamente y los dejó por ahí, algunos no los pudo salvar, en fin algo era algo. Tomó un paño, a parecer estaba muy tenso con todo.